Una versión sobre el origen de La Cumparsita

Hay distintas versiones sobre La Cumparsita, en cuanto a su fecha exacta de creación y a la de su grabación y también sobre las distintas letras que acompañaron su bellísima melodía.

Seguiré la opinión de la mayoría de los estudiosos. Durante la Primera Guerra Mundial, que duró de 1914 a 1918, el tango era casi una mala palabra en ambas márgenes del Plata.

Es muy conocido el hecho que Mattos Rodríguez integraba, como estudiante de Arquitectura, la Federación de Estudiantes del Uruguay. Con esfuerzo, habían alquilado un modesto local y comprado un piano de cierta calidad.

Por falta de pago de los alquileres, habían sufrido el embargo de todos sus muebles, el bonito piano incluido, hecho que fue lo que más les dolió. Alquilaron entonces otro piano, muy destartalado. Y allí el 20 de diciembre de 1917 -Mattos Rodríguez tenía 17 años- creó y ejecutó por primera vez, los compases de una marcha –aún no era tango- que llamó “La Cumparsita”.

Luego Roberto Firpo, al que el joven Mattos Rodríguez le llevó su pieza, le agregó compases; y recién entonces se transformó en un tango.

Y fue Firpo el casual destinatario inicial de la partitura de “La Cumparsita”, porque el músico argentino estaba actuando en esa época en Montevideo, en la famosa confitería “La Giralda”.